El joven comunicador popular advirtió contra una embestida ideológica para formar a jóvenes como cuadros del fascismo a través de ONGs de dudosa procedencia. La participación política de la juventud en este proceso revolucionario ha sido un elemento de vital importancia, se nos ha brindado la oportunidad de luchar a la vanguardia de este proceso político desde diferentes trincheras. Pero ahora grupos de bagres de la ultraderecha pretenden influir en los jóvenes barineses para engatuzarlos con “revoluciones” de cartulina y manitas blancas; pero se quedarán con las ganas. La afirmación corresponde a Eduardo Pérez Viloria, joven comunicador popular que conduce programas en radio y tv.

Eduardo Pérez Emoción

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Explica Viloria que “Los revolucionarios son o no son, no  existen términos medios”. Por eso hace un llamado para que la colectividad no se deje engañar  por la marionetas fascistas que pretenden crear focos violentos que pudieran desestabilizar la buena gestión del gobierno nacional y regional. “Ni mucho menos con cursos de formación política desde lujosos hoteles para el montaje de revoluciones de derecha”, agrega.

Señaló Pérez Viloria que los jóvenes realmente revolucionarios de Barinas están atentos ante cualquier amenaza dentro del territorio regional. Destacó que “en Barinas existen diferentes colectivos de jóvenes que desarrollan actividades en distintos ámbitos de la sociedad y su poder radica en mantenerse formados y vigilantes ante cualquier despropósito del fascismo”.

Alertó Pérez Viloria sobre una embestida generada por organizaciones no gubernamentales financiadas desde el extranjero que vienen a Barinas a formar cuadros fascistas valiéndose de algunos incautos. “Hago un llamado a todos los jóvenes que están indecisos, que todavía no logran entender la importancia de establecer un sistema político donde todos los actores sociales seamos tratados de la misma manera. Reflexionen: la Revolución Bolivariana es el camino para encontrar esa felicidad tan anhelada” subrayó.

“A mi entender, una revolución es, en términos generales, un proceso de transformación profunda de las estructuras económicas, políticas, sociales e incluso ideológicas o culturales de una sociedad determinada”. Por eso no nos engatuzarán con sus cantos de sirena, concluyó el comunicador popular.

 

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