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El sólo hecho de anunciar la construcción de un monumento al General del Pueblo Soberano en la Redoma de la UNELLEZ para sustituir el adefesio que se desplomó extrañamente, ha hecho temblar de nuevo a la oligarquía y sus arrimados que detentan el poder en esa parcela de poder en la alcaldía de Barinas. La declaración corresponde al historiador Nelson Montiel, intelectual estudioso del llano y los llaneros, con una vasta obra.
Agrega Montiel que “quisiera la oligarquía llenar las plazas y paredes con la figura de Carlos Andrés Pérez, héroe de la corrupción; o de Caprichito y su combo, héroes de pitiyaquismo y del arrastramiento ante los yanquis.
“Es la guerra de los símbolos en sus inicios, ellos desde allí y dirigidos por la llamada Trilogía del Mal han comenzado a deschavizar la ciudad, removiendo todos los símbolos de la revolución”, sostiene. “Emulan a los invasores yanquis cuya conducta al llegar a un país invadido es borrar la memoria histórica y todo vestigio que tenga que ver con la cultura local”.
Los yanquis en Irak, tumbando un monumento alusivo a Hussein declararon la toma de ese país, agrega Montiel. Por tanto en Barinas quieren hacer lo mismo: simular que quieren limpiar la ciudad de la basura política, que no quieren saber nada de política, pero mientras tanto hacen su tarea fascista de borrar los iconos y símbolos de la revolución con sus caras de “yo no fui”.
Recordó el historiador que, en plena campaña electoral, “el terrorista Leopoldo López vino a derrumbar en El Amparo un monumento alusivo al Comandante guerrillero Manuel Marulanda para que su jefe criminal Alvaro Uribe durmiera tranquilo”.
Concluye Nelson Montiel diciendo que “aquí no hay casualidades”. “Estamos en un escenario de confrontación de dos modelos: el modelo humanista, socialista, inclusivo y revolucionario y el modelo terrorista, fascista, capitalista que persigue el pueblo, odia el pasado, se burlan de la patria, porque sus amos son los gringos y a ellos los imitan”, finalizó.